El pasado 7 de junio, Estados Unidos y México llegaron a un acuerdo para frenar el amago del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer aranceles del 5 % a todos los productos mexicanos, que incluso alcanzaría el 25% si el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador no detenía el flujo de migrantes.
El acuerdo, aunque celebrado, también ha levantado suspicacias en la nación latinoamericana por dudas de lo negociado y lo dicho por Trump, quien sugirió que se había pactado algo “muy importante”, que será revelado en “un futuro no muy lejano”, y que necesitará de la aprobación del legislativo mexicano.
De inmediato, el propio López Obrador y su canciller, Marcelo Ebrard, explicaron que implica la búsqueda de distribución de asilo para los inmigrantes junto a organismos internacionales, como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). En lo que hay coincidencia, casi a nivel generalizado, es que es el acuerdo da un respiro a los mexicanos.
El anuncio del acuerdo comercial y sus posibles implicaciones no pasó desapercibido para diversos líderes evangélicos mexicanos. Varios de ellos, consultados por Evangélico Digital, coincidieron en que el pulso comercial entre México y Estados Unidos apenas comienza.
“El acuerdo entre México y Estados Unidos logrado en gran medida por la Cuarta Transformación traerá justicia social al país”, confió el representante de la Confraternidad de Iglesias Cristianas Evangélicas, Arturo Farela, durante un acto realizado en la Ciudad de México.
Frente al presidente López Obrador, expresó que la justicia social tiene dos vertientes principales, ya que está fundamentada sobre la verdad y la equidad. “Creo que ambos equipos negociadores, tanto el de México como el de Estados Unidos, hablaron con la verdad y dijeron lo que tenían que hacer para no destruir y no hacerse daño”, añadió.
El líder de Confraternice es conocido por ser un fiel partidario del presidente mexicano. Farela asiste de manera frecuente a reuniones con AMLO en Palacio Nacional. “Muchas gracias señor presidente por dar la cara por los pobres, por los huérfanos por los extranjeros, por los campesinos, por los jóvenes. Que Dios bendiga a México”, exclamó.
Por su parte el pastor Cirilo Cruz, presidente de la Confraternidad Evangélica de México (CONEMEX) salió al paso de las declaraciones de Arturo Farela.
“Aunque ha habido expresiones de triunfalismo, entre ellas por parte de alguien que se dice representar a la iglesia evangélica, tenemos mucho temor quienes lo tomamos más en serio todo ese tipo de cosas”, dijo Cruz. “El señor Trump siempre va a estar de alguna manera u otra buscando cómo realizar sus objetivos y cómo llegar a ellos. Entonces no se ha retirado del todo la amenaza de subir los aranceles a los productos mexicanos básicamente es como un primer round”.
El líder de CONEMEX afirmó que “estamos a la expectativa a ver qué es lo que va a pasar sobre todo orando a Dios porque nos duele la gente que está migrando sobre todo de países como Honduras que se están conflictuando, que están entrando en crisis y otros países que por algo están migrando por miles”.
A medida que se conocen más detalles del acuerdo alcanzado se consolida la idea de que ni mucho menos es un pacto definitivo, sino más bien un balón de oxígeno para México, que gana tiempo y evita la imposición de aranceles de forma inmediata.
El licenciado Aarón Lara, presidente del Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia y de la ONG Concertación A.C., coincidió al afirmar que “la negociación que se ha hecho sólo ha sido parcial, no ha sido definitiva”. Lara agregó que “incluso aún estaría por ver si esta amenaza [de los aranceles] se cumple o no con la supervisión o la aprobación de las medidas que el gobierno mexicano pueda tomar”.
Con respecto a las declaraciones dadas con anterioridad por Arturo Farela, Lara comentó que, “también nos parece sumamente atentatorio que el presidente designe dos voceros, uno para la iglesia católica y otro para la iglesia evangélica. Ni tanto los católicos pueden asumir como su representante, dadas las posiciones ideológicas del padre Solalinde, ni los evangélicos podemos aceptar la representación del pastor Farela”.
Asegura el líder de Concertación A.C., además, que “en el caso evangélico es un sector infinitamente pequeño el que reconoce al pastor Farela como interlocutor. En todo caso las iglesias que él representa no representan ni el 1% de la iglesia evangélica mexicana”.
Finalmente, desde la ciudad de Chihuahua el pastor Roberto Tinoco, fundador del ministerio Palabra Viva, opinó que “no nos conviene esa guerra; pero antes de enviar representantes ‘a negociar’, lo mejor hubiese sido cerrar la frontera antes de la mordida”.
Tinoco publicó en días recientes un video blog con su opinión sobre el problema México – Estados Unidos (ver más abajo). En dicho video comparaba al presidente estadounidense Donald Trump con un oso sediento de sangre mexicana.
Al respecto ahora Tinoco ahora comenta, “el oso probó sangre y sabe por dónde podrá seguirnos presionando: los aranceles y el comercio. Dependemos en gran medida de ellos y nos coloca en desventaja”.
Vea a continuación el video blog del pastor Roberto Tinoco “México se desangra por dentro y por fuera”:
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