Más de 20.000 nicaragüenses han solicitado refugio en Costa Rica desde que estalló la crisis sociopolítica en su país, según datos de la Dirección de Migración y Extranjería costarricense. Sólo en junio, el país recibió al menos 5.200 solicitudes. El sentimiento generalizado en la población tica es que la situación se sale del control de las autoridades.
El tico promedio siente que los inmigrantes del norte les quitan puestos de trabajo (y el desempleo subió al 8,7% en el segundo trimestre de este año), percibe que los nicaragüenses reciben atención preferencial en clínicas y hospitales públicos, y achaca a los llamados “nicas” el aumento en los casos de criminalidad.
El pueblo costarricense se ufana de ser pacífico (a veces más de la cuenta). Pero la tensión acumulada estalló el fin de semana y tuvo su epicentro en un parque de San José, la capital. El parque La Merced venía siendo desde hace años, sitio de reunión de los nicaragüenses en Costa Rica. Se podía encontrar una muestra de la variedad gastronómica pinolera en las ventas improvisadas que se habían instalado en el céntrico parque, y escuchar ahí por doquier el acento característico de los nacidos en la patria de Rubén Darío.
El día anterior un canal de televisión divulgó declaraciones de nicaragüenses afirmando que cualquier costarricense que se acercara al sitio sería asaltado, pues éste prácticamente era ya territorio suyo.
Esto exacerbó los ánimos de los ticos y se organizó en redes sociales una manifestación nacionalista en La Merced. Con banderas de Costa Rica y camisetas de la selección de futbol, un grupo de costarricenses llegó al parque entonando el himno nacional y cánticos propios de las barras deportivas. Las imágenes divulgadas no muestran enfrentamientos físicos entre nicas y ticos, pero pronto la policía intervino disolviendo la manifestación y deteniendo a varios.
“Estamos protestando porque la Policía de Migración está dejando pasar a demasiados extranjeros nicaragüenses hacia Costa Rica y realmente no se puede aguantar más porque esto es una invasión”, afirmó a la agencia Efe, Luis Mauricio Vargas, uno de los manifestantes.
Lo sucedido el fin de semana reavivó una vez más en el país el debate en torno al tema inmigratorio. Para el gobierno y los medios de comunicación liberales, lo ocurrido fueron actos de xenofobia, para una inmensa cantidad de costarricenses (según miles de comentarios escritos en redes sociales) fue una expresión de disconformidad.
LA VISIÓN PASTORAL
Los líderes evangélicos urgen a atender problemática migratoria en Costa Rica ante esta situación y hacen un llamado a la calma y recuerdan el amor y la tolerancia que deben tener los cristianos hacia las personas inmigrantes.
En un mensaje emitido a través de radio Faro del Caribe (una respetada emisora cristiana con más de 70 años de antigüedad) el pastor Reynaldo Salazar, expresidente de la Alianza Evangélica Costarricense, recordó que las Sagradas Escrituras llaman a acoger y ayudar al extranjero. Salazar llamó la atención sobre el clima de odio y violencia que se vive en el país. El pastor hizo una oración pidiendo a Dios que reine la paz.
Por su parte, el actual presidente de la Alianza Evangélica Costarricense, Dr. Jorge Gómez, resaltó el pasaje de Levítico 19:34, “la Palabra de Dios nos dice que debemos amar al extranjero como a nosotros mismos y recibirle de esa misma forma”. Gómez instó a las iglesias a abrir sus puertas para recibir a los inmigrantes y orar por sabiduría para las autoridades que deben ofrecer soluciones.
POLÍTICOS EVANGÉLICOS OPINAN
El partido Restauración Nacional, que tiene mayoría en el Congreso y cuyos diputados son todos creyentes evangélicos, emitió un comunicado con su posición respecto al tema. La agrupación política urgió al gobierno a “buscar una solución oportuna YA”.
“No se pueden cerrar las puertas a seres humanos que huyen por su vida y libertad. Pero SÍ es nuestra obligación constitucional como gobierno, establecer las medidas necesarias de filtro y de control para evitar el ingreso de una migración nefasta con propósitos ocultos”, lee el comunicado de Restauración.
El documento, firmado por el presidente del partido, el pastor Carlos Avendaño, y por su Secretario General, Miguel Ángel Quesada, agrega que, “es urgente tomar las medidas del caso… sobre todo, por la paz y tranquilidad de la ciudadanía costarricense”.
“No podemos permitir que el costarricense haga justicia por sus propios métodos, por la inoperancia e inacción del Gobierno. No hay peor síntoma de resquebrajamiento democrático-social en un país, que cuando surge en la ciudadanía la “desconfianza” en la capacidad de su gobierno para solucionar sus problemas y demandas”, termina el comunicado.